
Los muertos vivientes es una de las obras más interesantes que nos ofrece el mercado yanqui en la actualidad. No voy a empezar a enumerar ahora todas sus virtudes, pero sí quiero dejar claro que como fan incondicional de la serie, me interesa mucho todo lo relacionado con ella, incluido el proceso de creación. Por eso me llamó mucho la atención el artículo que encontré en la web de Comic Monsters, en donde el dibujante Charlie Adlard explica el proceso de creación de una página.
Como ejemplo, Adlard escogió una página del número 56 (en EE.UU. acaba de salir el 53, y yo cada vez me muerdo más las uñas por el siguiente). Desde el principio, quiere dejar claro que su trabajo para Los muertos vivientes es una excepción dentro de sus trabajos, en el sentido de que tiene que simplificar al máximo el proceso creativo para conseguir terminar cada mes las 22 páginas y la cubierta de rigor (así que habrá que echarle a Kirkman la culpa de los retrasos que hay a veces en la publicación).
Lo primero de todo, lógicamente, es leer el guión y después hacer un esbozo a lápiz de la página. Adlar decidió abandonar el formato habitual del A3 para dibujar sobre un papel del mismo tamaño que tiene el comic-book definitivo. De esta manera, además de ganar tiempo, Adlard asegura quedar más satisfecho con el resultado final, ya que así todos los detalles y las líneas que añade durante el proceso de entintado no se pierden durante los procesos de reducción e impresión.
[seguir leyendo]