Llevo días, semanas más bien, dándole vueltas a la cabeza a un tema. El caso es que es un tema bastante complicado de analizar por todas sus implicaciones que tiene y por el profundo amargor que me produce cada vez que pienso en ello. Hoy quiero hablar del tratamiento que hacen los medios de comunicación cuando hablan de comics.
Pero no estoy hablando de tonterías como pudieran ser las continuas equivocaciones al atribuir creaciones de personajes o de comics a otros autores, sobretodo cuando hablan de adaptaciones al cine. Que bueno, eso tengo asumido que tienen un sombrero con nombres de series, grupos y personajes y otro con nombres de dibujantes y guionistas y sacan al azar un papelito de cada uno y ya. Y a veces no es culpa de los servicios informativos (o no al 100%), sino de los propios departamentos de prensa de la productora o distribuidora de la película que a menudo pasan información errónea sobre la película que tienen en sus manos, lo cual tiene mucho delito. Si estás vendiendo una película qué menos que conocer lo que vendes, en fin.