Después de que mi compi Miguel publicara la lista de premiados en la Tokyo Anime Fair de este año, decidí echar un vistazo a algunos de ellos para ponerme al día en cuestión de animación japonesa. Debo decir que me alegro de haberlo hecho, porque me he encontrado con producciones muy interesantes de las que ya iré hablando próximamente, y hoy voy a empezar con ‘Eve no Jikan’, creada por el Studio Rikka y que se llevó el premio al mejor OVA.
‘Eve no Jikan’ está ambientada en un futuro no demasiado lejano, aunque sí lo suficiente como para que los robots y androides se hayan convertido en artículos de uso común. Los androides trabajan como sirvientes de las familias japonesas, y su aspecto es idéntico al de cualquier humano, con la salvedad de una aureola giratoria que llevan encima de la cabeza para que la gente pueda distinguirlos.
El protagonista de esta historia es un joven llamado Rikuo. El chico empieza a notar que su androide está actuando de una forma extraña, y que incluso da muestras de realizar acciones por su propia iniciativa. Un día, Rikuo decide rastrear los pasos del androide en compañía de su amigo Masaki y terminan llegando a una cafetería muy peculiar (llamada ‘El tiempo de Eve’), en la que humanos y androides son tratados como iguales. De hecho, los androides deben desactivar la aureola que los identifica, para que nadie pueda distinguirlos a simple vista.