Los surcoreanos Youn In-Wan y Yang Kyung-Il nos presentan este ‘Defense Devil’, una obra que combina acción, misterio, humor y criaturas maléficas con un resultado que en este primer tomo es más que notable. El prota de la historia es un demonio llamado Kucabara que ha sido expulsado del Reino de los Infiernos, y por tanto, despojado de sus poderes. Su única oportunidad para recuperar su antiguo rango es recolectar la materia oscura que emana de los condenados a pasar la eternidad en el infierno.
Una tarea a la que le urge constantemente su pequeño pero matón ayudante: Bchuler. La relación entre ellos es, precisamente, la que nos deja los momentos más divertidos del manga. El problema es que Kucabara no parece tan decidido a arrebatar esta materia oscura a los muertos, como a ayudarlos a demostrar su inocencia. Y es que todos aquellos que llegan al averno parecen haber cometido un grave delito en vida, pero del que no siempre son culpables.
De este modo, Kucabara conocerá a diversos personajes que estarán abocados a una serie de castigos y suplicios y se ofrece para ser su abogado. Una vez contratado, comienza la investigación para reunir pruebas que exculpen a sus clientes. En el primer caso que podemos leer (o sentencia, tal y como se llaman aquí los capítulos), Kucabara deberá ayudar a un joven que supuestamente ha agredido a varias personas con un bate de béisbol, a bordo de su motocicleta.