Como por arte de magia, el mercado de las revistas especializadas en manganime de nuestro país se ha visto súbitamente relanzado con la aparición de no una sino tres publicaciones de mayor o menor calado. ¿Vendrán para quedarse o serán los últimos coletazos de los medios impresos?
En febrero regresaba de entre los muertos Minami, una de las revistas más clásicas del sector que junto a Dokan y Shirase (que yo mismo coordinaba) configuraron durante varios años el modelo a seguir: información fresca, un buen número de páginas a todo color y, por supuesto, el CD-ROM de rigor. Ahora, la nueva Minami se ha dejado en el camino este CD, reemplazándolo por un sistema de descargas protegidas con contraseña, y ajustando el precio a 2,95 euros.
Pocos meses después, en mayo concretamente, conocíamos el lanzamiento de Niguru, autodefinido como «un nuevo fanzine con espíritu de revista sobre el mundo del comic, la animación y el entretenimiento japonés». El primer número incluía 52 páginas con un cuidado diseño (que recuerda en más de un aspecto a la ya mencionada Shirase) al precio de 3,50 euros y periodicidad bimestral pero a día de hoy nada más se ha vuelto a saber de ella.