‘Cazafantasmas: El Lugar Más Mágico de la Tierra’, sustos y humor se dan la mano

Parece mentira que, con el poco tiempo que llevan de cara al público, al menos en esta nueva encarnación, los chicos de Fandogamia se han ganado la simpatía de buena parte del fándom comiquero. ¿La razón? Pues pueden ser numerosas y muy variadas pero la que más justicia haría podría ser el material que han elegido para publicar, colecciones de esas que tan pronto se aprecia la portada, el buen rollo aparece de la nada. Ocurre con “Giant Days”, una serie tan divertida como adictiva, y también con todo el material relacionado con uno de los clásicos cinematográficos ochenteros más queridos por los aficionados. Este ‘Cazafantasmas: El Lugar Más Mágico de la Tierra’ supone un regreso más que notable a toda la mitología que se desprendía de las películas, incluso la anterior entrega en la que asistíamos a un cruce imposible con Las Tortugas Ninja dejaba el listón bastante alto, teniendo en cuenta el producto del que se trataba.

En esta tercera entrega volvemos a la serie regular con dos historias que nos traen de vuelta al tándem formado por Erik Burnham y Dan Schoening, los autores encargados de firmar mes a mes estos divertidísimos tebeos y, en esta ocasión, nos entregan un par de historias, una larga y otra más corta. Bien es cierto que muchos podrían pensar que la nostalgia es el único motor que nos movería a la hora de adquirir este volumen, pero desde aquí nos adelantamos a ese pensamiento y afirmamos que Cazafantasmas nos ofrece mucho más, y eso que algunos de los elementos que van a usar en los relatos son los usuales: fantasmas, espíritus de mal humor, ectoplasma en cantidades industriales y mucha diversión. Tras la lectura del tomo no nos cabe la menor duda que uno de los puntos fuertes es el tratamiento de los personajes, Burnham consigue el equilibrio perfecto entre lo que ya conocemos por las películas y todo lo que es cosecha propia, mostrando siempre un tremendo respeto por lo creado por Ivan Reitman en el cine.

El desarrollo de los protagonistas sigue su curso página tras página, algo que no frena en absoluto el ritmo de la trama principal, el tono aventurero que imprime el guionista a la historia está presente continuamente y no se verá entorpecido por los aspectos más “personales” de la cuadrilla. Mención aparte merece la labor de Schoening a los lápices, algo que ya quedó patente en las entregas anteriores y que en este caso sigue por el mismo camino, un estilo muy agradable, de trazo dinámico y caricaturesco, sin tener que “calcar” algún fotograma para hacer reconocibles a los personajes. No podemos hacer otra cosa desde esta página que recomendar una serie como esta que, sí, apela a la nostalgia del lector, pero también se “molesta” en ofrecer un producto de calidad y que poco a poco se vaya alejando de las aventuras originales y va creando su propia identidad. Y eso que este reseñador no suele ser amigo de este tipo de productos basados en películas o series televisivas, pero Los Cazafantasmas de Fandogamia son todo un acierto. Vamos a por más.
[Grade — 8.00]